Isaías 41,10 - ¡Ya Tú sabe’!

Estamos seguros de que todos los aquí presentes, han vivido experiencias agradables, se han contagiado y recibieron en algún momento, la influencia de él, de la magia de su arte, de su música sana, del canto con bellas líricas, de la sonrisa en el rostro de una amistad sincera y del mensaje de amor que transmitió y sigue transformando los corazones, con su espíritu vivo y el Ministerio musical “Proyecto 67”, trascendiendo al gusto e interés de quienes a pesar de no haberlo conocido, están aquí y seguirán contagiados, admirados al escuchar sus canciones y disfrutando al observar sus videos.

Gracias por estar apoyando esta obra de arte musical, realizada con el esfuerzo dedicado de todo un equipo de jóvenes que solo quieren ser ejemplo alabando y adorando con el canto, la voz, y su trabajo, al Rey de reyes, al Señor de Señores. Que con la pasión y el espíritu que impregno Arturo a este ministerio, seguirá vivo entre nosotros como uno de sus grandes legados, en las obras de Dios.

Por eso lo recordamos y nunca lo olvidaremos, por lo que transformo y sembró en cada corazón y seguirá sucediendo, cada vez que uno de nosotros habitualmente diga la reiterada expresión de; Ya tú sabes’, pasará por nuestra mente la persona que conocimos en Arturo.

Lo recordamos siempre por sus frutos a través de sus legados; Cuando La Fundación que lleva su nombre, dedicada al bien de la niñez, realiza una obra de amor, cuando frecuentamos conectarnos un grupos de 15 a 20 personas, los 1er. Sábados de cada mes en el espacio virtual, “Dios con Arturo 101”, donde solo se habla de santidad y espiritualidad, fruto de su ejemplo y testimonio de vida, orientado por el Fray Jit Manuel Castillo de la Cruz, (OMF), cuando compartimos cada semana, los cantos de la misa dominical, en el espacio virtual, “Cantores litúrgicos”, cuando en su nombre, regalamos de manera particular el libro: “Mi canto es joven”, como promoción de la adoración y alabanzas que el animaba con su vida cantándole a Dios, para que a través del canto sigamos su testimonio, haciendo vida a su memoria y que estará plasmada en los quince capítulos de las páginas de un libro que lo identifica como lo que fue Arturo para todos, escrito por sus padres, para dar a conocer su obra a las actuales y futuras generaciones, con el título: “Un ángel prestado del cielo”, describiendo sus memorias, después de su partida y que se seguirá escribiendo a través de los años, por sus frutos como libro catequístico, por el ejemplo y modelo de testimonio, a seguir e imitar de un joven cristiano salesiano, motivando a que se siga repitiendo, lo que dijo una jovencita de 15 años, durante su novenario, conocida y cercana a él: “ Yo quiero ser como Arturo”.

Hoy llevo vistiendo, atuendos de los que el uso en espacios y escenarios, porque en nuestra mente y nuestros corazones, están guardadas todas sus expresiones de amor que nos brindó, y nuestro mayor deseo es precisamente, parecernos no solo en lo físico, sino en su forma, estilo de vida y manera de entregarse desinteresada y espiritualmente, transformando los corazones para la obra de Dios.

Queremos parecernos a él, por su bondad y ternura, que le hicieron ganar el reino de los cielos, resucitando con el Señor Jesús. Ahora somos nosotros que les pedimos sus bendiciones y lo hacemos vivir en nuestros corazones y nuestras mentes, en cada gesto de amor, en cada beso sincero y en cada abrazo caluroso, como así lo expresaba Arturo.

Gracias a Dios por darnos la oportunidad de tenerlo entre nosotros durante 30 años y de permitir que formara parte de nuestra familia, prepararlo, educarlo, cuidarlo y criarlo como tu hijo, Señor, que junto a su hermano mayor Leito, su mejor amigo y aliado confidente, con quien nunca tuvo contradicciones, y su madre mi esposa Aidita, con la que hemos formado este hogar hace 34 años, y que hoy les damos las gracias a todos por su acompañamiento, por el cariño brindado a nuestro Arturo, que en su memoria lo recordamos con este homenaje, bajo la presencia del espíritu de Dios que recibimos en nuestra formación y crecimiento espiritual, gracias a nuestros padres y a los Salesianos de Don Bosco, Gracias por el apoyo a “Proyecto 67” y a todo su equipo de producción, por este concierto inolvidable en homenaje a su amigo y hermano Arturo 101, como la cantidad de razones para no olvidarlo, como lo decimos en la canción que le compusimos con motivos de su 1er. Aniversario de regreso a la casa del Padre celestial.… Gracias y muchas bendiciones para todos

‘Ya Tú Sabes’.…